¿Cómo arreglar los botones del control de mi PS5 fácilmente?
Los controles o mandos de los PlayStation son de las características más importantes de los equipos. Pues, con estos pequeños aparatos es que se puede manejar cualquier acción dentro del sistema de la consola. Da ahí radica el cuidado y la atención que es necesario tener con ellos.
Si los mandos se dañan, será muy difícil por no decir que imposible entrar a los juegos y controlar las acciones. De hecho, no tendrás muchas opciones al configurar el PlayStation, ni siquiera resetear el DualShock, ya que no será factible pulsar ningún botón a fin de entrar en los ajustes.
Pasos para arreglar los botones de PS5 que no funcionen
Si cuentas con los mandos llamados Dualsence en PS5 o con el Dualshok en el cuatro, debes cuidarlos mucho. Los Dualsence trajeron un nuevo diseño con estilo del futuro, un mejor hardware y varias funciones recientes. Sin embargo, a pesar de ser un controlador de vida corta en el mercado, ya se encontraron fallas.
En ese sentido, se apercibió que las teclas equis, cuadrado, círculo y triángulo se quedan pegados con frecuencia. Lo que en las redes llamaron como Dualsense pegajoso. No es un acontecimiento aislado, ya que muchos usuarios se quejaron de la misma falla en cada botón facial.
Se trata de un problema en la fabricación o en los ajustes del controlador. En caso de que un pulsador se queda pegado o esté muy duro, hay ciertas cosas que se vale intentar. Algunos de estos procesos también sirven en la joystick y DualSense, veamos de qué se trata.
El primer consejo es tomar una boquilla de una botella y rociar aire en una de las teclas. Por ejemplo, en el cuadrado, hay que incrustar la boquilla en la ranura y soplar.
De esta manera, se quitan residuos de sucio, comida o pedazos del control que se partieron. Estas partículas pueden atascar el controlador y no permiten que la tecla presione la goma de modo correcto.
¿Cómo evito que los botones de mi mando se estropeen?
La mejor manera de evitar que un control se dañe es al ponerle mucha atención y tratarlos con cuidado. En este sentido, hay que apretar cada botón con delicadeza y así no gastar las gomas con rapidez.
Pues, en los juegos, si lo tocas con fuerza o lo haces suave, el control ejecutará las funciones necesarias, no hay necesidad de maltratarlos. Si en una batalla necesitas un choque fuerte, recuerda que en los juegos se mide la duración del toque al botón y no la intensidad con la que lo golpeaste.
Una recomendación de relevancia es que sepas en qué lugar dejas el control. Mantenlos en un sitio seguro, no los aparques en orillas, ya que, si se caen, es viable que se partan por dentro. Otra posibilidad es que algunas piezas se muevan de su lugar, produciendo que dejen de funcionar.
Apártalos del alcance de los niños, puesto que los pequeños no conocen la fragilidad de un control de un PlayStation. De modo que, cualquier golpe contra el piso podría ser perjudicial para los botones del mismo.
Algunos juegos no requieren del empleo de un controlador Dualsense. Pues hay variables a apretar el cuadrado o la equis. Estamos hablando de los videojuegos de carreras en la que es plausible controlar el carro por medio de un joystick o palanca de mando.
Si deseas saber la vía en la que hay que cuidar los accesorios de PlayStation, debes informarte muy bien. Por lo que aquí la sección de soporte de control inalámbrico en el que visualizarás los datos de los ajustes y cuidados. Tanto de los controladores, la joysitck, la ranura de discos y el software de la consola
Personalizar su configuración del control para no perder todas las funciones
Una manera de intentar reparar los controles es abriéndolos, en otras palabras, quitarles la carcasa con el objeto de revisar el interior. En ciertos equipos, la falla se origina por el sucio almacenado, por lo que puede bastar con una limpieza. Asegúrate de que no existan escombros en el mecanismo de los botones.
Sin embargo, debes conocer que estos equipos son muy sensibles, por lo que cualquier movimiento en falso es perjudicial. Así que, si intentas arreglar un cable, Joystick u otro artefacto, mueve cada pieza con extremo cuidado. Lo recomendable es buscar a un técnico que prueba con configurar de nuevo el mando.
Si tienes conocimientos en la programación de los aparatos, intenta hacer directos con tus amigos y pedirles consejo para configurarlos. También aplica cuando hay un botón que no se puede salvar, por lo que es imprescindible dejarlo de utilizar.
De forma que, al reprogramar el mando, quitarás la función de dicho botón y le colocarás una que no sea de relevancia en tus juegos preferidos. Recuerda cargarlo antes de iniciar un procedimiento, porque se descargan con facilidad al mover sus opciones. Pincha en la central de mando o el círculo PS en el instante que conectes vía USB el mando y la consola. Entra en la configuración y asigna una función nueva.